Los homínidos habitaron Europa al menos desde hace casi dos millones de años, lo que representa medio millón de años antes de lo que se estimaba, indica un análisis realizado en el yacimiento fósil de Grăunceanu, Rumania, donde se localizó la presencia de homínidos, la familia de primates a la que pertenece el Homo sapiens.
Thank you for reading this post, don't forget to subscribe!Esta es la evidencia más antigua confirmada de actividad de homínidos en el continente europeo que data de hace un millón 950 mil años, señala un artículo científico realizado por un equipo de investigadores del Departamento de Sociología y Antropología de la Universidad de Ohio, Estados Unidos, encabezado por John Smith.
Publicada en la revista Nature Communications, la investigación analizó más de 4 mil 500 restos de diversos especímenes de animales entre ellos 20 huesos, ocho de los cuales tenían marcas de corte, que indican métodos de carnicería utilizados por homínidos.
El artículo titulado “Presencia de homínidos en Eurasia hace al menos 1.95 millones de años” (leer en: DOI 10.1038/s41467-025-56154-9), señala que las marcas son consistentes con técnicas de descarnación, lo que confirma la presencia de homínidos en la zona hace entre 2.2 y 1.9 millones de años. Mucho antes de lo estimado.
“No está claro el momento de la dispersión inicial de los homínidos en Eurasia. La evidencia actual indica que estaban presentes en Dmanisi, Georgia, hace 1.8 millones de años (Ma), pero otros rastros efímeros de homínidos en Eurasia son anteriores”, señalan los científicos en el artículo. “Aquí presentamos evidencia de actividad de homínidos en el yacimiento de Grăunceanu, Rumania, en forma de múltiples huesos con marcas de corte”.
se analizaron más de 4 mil 500 restos de diversos especímenes de animales entre ellos ocho de los cuales tenían marcas de corte, que indican métodos de carnicería utilizados por homínidos.
Las estimaciones de edad sugieren que los restos de Grăunceanu convierten a este yacimiento en una de las más antiguas encontradas hasta ahora en Europa.
Avestruces, pangolines y un mono europeo extinto forman parte de los restos de fauna analizada, lo que sugiere que el entorno era una mezcla de bosques y pastizales, con inviernos relativamente suaves y precipitaciones estacionales más intensas que las actuales.
Este escenario habría sido propicio para la supervivencia de los homínidos, quienes demostraron una notable flexibilidad ecológica al adaptarse a condiciones templadas y estacionales.
Las reconstrucciones ambientales basadas en análisis isotópicos sugieren que Grăunceanu habría sido relativamente templado y estacional, lo que demuestra una amplia tolerancia al hábitat incluso en los primeros homínidos de Eurasia.
“Nuestros resultados presentados junto con muchas otras líneas de evidencia apuntan a una presencia generalizada, aunque quizás intermitente, de homínidos en Eurasia hace al menos dos millones de años”, afirma el artículo.
Este hallazgo sugiere que los homínidos se dispersaron por Eurasia mucho antes de lo que se pensaba, aprovechando períodos interglaciares con condiciones climáticas favorables.
La presencia de herramientas y marcas de corte en huesos indica que estos homínidos ya poseían habilidades avanzadas para procesar carne, lo que les permitió explotar una amplia gama de recursos en entornos diversos.
Este descubrimiento abre un nuevo capítulo en la comprensión de la evolución humana y las migraciones tempranas. Sugiere que los homínidos no solo se limitaron a regiones cálidas, sino que también exploraron y colonizaron áreas de latitud media con climas más variables. Esto refuerza la teoría de que la capacidad de adaptación fue clave para su éxito evolutivo.
Rumania se posiciona como un punto clave en el mapa de la prehistoria humana, ofreciendo pistas cruciales sobre cómo nuestros ancestros se expandieron por el mundo. Los investigadores esperan que en futuros estudios en la región arrojen aún más luz sobre este fascinante período de la historia humana.
