Un equipo de investigadores de la UNAM propuso utilizar el medicamento antiviral sofosbuvir contra el coronavirus SARS-CoV-2, este fármaco desarrollado en 2007 es usado para el tratamiento de la hepatitis C, que afecta el hígado de 71 millones de personas en todo el mundo, de acuerdo con un artículo científico publicado en la revista Scientific Reports de Nature.
Como parte del ensayo global Solidaridad (Solidarity) para encontrar terapias contra la pandemia de COVID-19, la Organización Mundial de la Salud está probando la efectividad y seguridad de algunos de los medicamentos antivirales que ya existen entre los que destaca el remdesivir, desarrollado originalmente contra la hepatitis C, pero que ha sido exitoso contra el Ébola.
Se sabe que el hombre puede infectar de SARS-CoV-2 a otros animales como los gatos y hurones, pero de acuerdo con un estudio publicado en la revista Nature de esta semana, los perros también pueden ser contagiados por los humanos enfermos por COVID-19; aunque no desarrollan síntomas de la enfermedad los caninos son receptores del nuevo coronavirus.
Diversos países que buscan dejar atrás lo antes posible las medidas restrictivas por la pandemia como Alemania, Chile, Estados Unidos, Italia y Reino Unido han propuesto emitir “pasaportes de inmunidad” o de “libre riesgo” que garanticen supuesta inmunidad a los individuos que han sido infectados por SARS-CoV-2, pero la comunidad científica internacional rechaza dichos certificados.
Aún se ignora la causa, pero la sangre de los enfermos de COVID-19 presenta signos de engrosamiento y coagulación en los diferentes órganos lo que ocasiona la destrucción del organismo y la muerte; por ello, ahora los científicos y médicos la consideran no solo como una grave enfermedad respiratoria, sino también de la sangre y de múltiples órganos.
Hasta hace cinco años se desconocía que las enfermedades infecciosas causadas por virus, como el Ébola y el zika, también podían transmitirse a través del semen, por ello, desde que inició la pandemia de COVID-19 se sospechaba que el coronoavirus también podía transmitirse por vía sexual, pero hasta ayer un equipo de científicos chinos lo comprobó.